El COVID-19 está arrojando nuevas necesidades en la relación de una organización con sus empleados, más allá de implementar distancia social o medidas sanitarias en una oficina. Además de redefinir aquellos aspectos más urgentes, la pandemia arroja la oportunidad de configurar un nuevo paquete de valor en la relación con el empleado, que impacte sobre su atracción, desarrollo y retención, situando al talento interno como una ventaja competitiva diferencial. En este dossier mostramos cómo grandes empresas como RTVE, Banco Santander o EY España han apostado, bajo o fuera del contexto de la pandemia, por la co-creación con empleados para conocer y satisfacer parte de sus necesidades, así como imaginar colectivamente la mejor manera de trabajar.