Innovación abierta y participación para construir la universidad del S.XXI

30 de mayo de 2016. La universidad, tradicional referente de origen y de debate de las ideas, amplía su alcance y fronteras en la era digital. La UNED ha mostrado en la última edición de Zinc Shower su experiencia con una comunidad de innovación abierta, donde participan todos los colectivos que la forman (Centros Asociados, Alumni, PAS…) de cara a construir la universidad del futuro.

La iniciativa Horizonte UNED 50, que pone en valor al talento y la inteligencia colectiva que reside en la universidad, nace para conmemorar el próximo 50 aniversario de la UNED, en 2022, y supone “un espacio abierto para las ideas, donde la universidad participa, comparte, comenta y, sobre todo, genera valor con propuestas” en palabras de Juan Manuel Cigarrán Recuero, Vicerrector Adjunto de Tecnología de la UNED.

Más de 1.200 miembros de la comunidad universitaria forman parte de esta comunidad, donde se han compartido ya más de 700 ideas.


Las cifras ponen de relieve que detrás de la tecnología sobresale el talento humano. En ese sentido, la iniciativa se ha revelado como “un instrumento extraordinario para construir la universidad del futuro”, según Almudena Rodríguez Moya, directora del Gabinete Técnico del Rector de la UNED.

Pilar Roch, COO de ideas4all Innovation, ahonda en la misma dirección al afirmar que la universidad, como semilla de conocimiento, es un espacio idóneo para desarrollar una inteligencia colectiva que abarque a todos, a través de “canales integradores y bidireccionales, que impliquen tanto a la cúpula académica como al alumnado, en resumidas cuentas, a todos aquellos que dan forman a la Universidad, por medio de la innovación abierta”.

La Universidad escucha a sus colectivos de interés gracias a la innovación abierta Ejemplo de esquema jerárquico donde se desvincula al alumnado de la universidad | infografía: ideas4all

La participación se ha articulado en torno a seis ejes temáticos: metodología, oferta educativa, investigación y transferencia, internacionalización, gobernanza y centros asociados. Además, una serie de expertos de la propia universidad examinan el “ciclo de vida de las ideas”, que crecen y mejoran mediante un destilado colectivo.

Las mejores, se someten al escrutinio de un comité. Las aportaciones, que nacen tanto de alumnos como de la cúpula académica, son transparentes, democráticas y comparten la vocación de construir una Universidad mejor para hoy y para el futuro. La mayoría de los alumnos de hoy no formarán parte de la UNED en su 50 aniversario, pero buscan contribuir desde una visión integral y humanista, conscientes de los vínculos de la universidad con la sociedad.


“Los alumnos participan porque quieren construir la universidad del futuro, aunque ellos obtengan antes su título” – Almudena Rodríguez Moya, Directora del Gabinete Técnico del Rector de la UNED

La iniciativa también está aportando su granito de arena a la transformación digital de la UNED. Muchas de las ideas abundan en los nuevos formatos de aprendizaje (MOOCs, ebooks…) o proponen ir un paso más allá en la creación de una universidad “sin papeles” que permita, incluso, los exámenes telemáticos.

La innovación está muy presente en la mayoría de las ideas. Como destaca Cigarrán, “algunas de ellas puede que no sean viables a corto plazo por cuestiones de tiempos de implantación o por motivos económicos, pero ponen de manifiesto una necesidad real y marcan la dirección en la que tiene que mirar la universidad con el fin de materializarlas cuando se den las condiciones oportunas”. Innovación de y para la universidad del futuro, en permanente construcción y en beta permanente.

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